EL CABRIL EN EL PARLAMENTO: DEFICIENCIAS
Córdoba celebra que la Comisión Europea investigue y pida más información a las autoridades de España sobre El Cabril
INFORME
SOBRE EL ALMACÉN TEMPORAL CENTRALIZADO EL CABRIL
Comisión
de Peticiones del Parlamento Europeo (20/02/2019)
Sebastián Pérez, Responsable de Organización Provincial
de IU, ha señalado que el Parlamento Europeo mostró su preocupación
sobre esta instalación.
Sebastián Pérez, Responsable de Organización Provincial de IU, ha
valorado en rueda de prensa la importante noticia que adoptó la Comisión
de Peticiones del Parlamento Europeo sobre la petición presentada en
relación a El Cabril y que la Comisión Europea ha decidido pedir más
información al Gobierno de España. Una petición que sigue la lucha
histórica de numerosas organizaciones políticas, sociales y ecologistas,
que ha sido trabajada de forma colectiva por todos estos colectivos y
organizaciones.
Sebastián Pérez se ha referido a los riesgos, peligros, opacidad y falta de transparencia en todo lo que rodea a El Cabril. “El Cabril nace desde una ilegalidad, tal y como recogen varias sentencias del Tribunal Supremo”. Además, Pérez ha manifestado que “los residuos que llegan a El Cabril se hacen por carreteras convencionales que pasan por nuestros pueblos y que ya ha habido algún accidente y se ha tenido que descontaminar el suelo”.
La Ecotasa que paga el Gobierno del Estado a la Junta ha sido otro de los puntos que ha tratado Sebastián Pérez que se ha referido “este impuesto que transfiere el Estado a la Junta no repercute en los pueblos afectados por El Cabril” y ha añadido “a más Cabril, menos desarrollo económico, más desindustrialización, más paro y más pobreza”.
La política energética y el cierre de las centrales nucleares es uno de los debates que se planteó ante el Parlamento Europeo. Pérez ha señalado que “no puede ser que Alemania produzca más energía solar que España y que es necesario e imprescindible que se apueste por un modelo energético de energías renovables, más limpias y más seguras”.
El gobierno estatal respondió ante la pregunta planteada por el Grupo Confederal de Unidos Podemos que ante el nuevo Plan General de Residuos Radiactivos permitirá abrir un debate en la sociedad española sobre las instalaciones nucleares y radiactivas.
INFORME COMPLETO PRESENTADO
Sebastián Pérez se ha referido a los riesgos, peligros, opacidad y falta de transparencia en todo lo que rodea a El Cabril. “El Cabril nace desde una ilegalidad, tal y como recogen varias sentencias del Tribunal Supremo”. Además, Pérez ha manifestado que “los residuos que llegan a El Cabril se hacen por carreteras convencionales que pasan por nuestros pueblos y que ya ha habido algún accidente y se ha tenido que descontaminar el suelo”.
La Ecotasa que paga el Gobierno del Estado a la Junta ha sido otro de los puntos que ha tratado Sebastián Pérez que se ha referido “este impuesto que transfiere el Estado a la Junta no repercute en los pueblos afectados por El Cabril” y ha añadido “a más Cabril, menos desarrollo económico, más desindustrialización, más paro y más pobreza”.
La política energética y el cierre de las centrales nucleares es uno de los debates que se planteó ante el Parlamento Europeo. Pérez ha señalado que “no puede ser que Alemania produzca más energía solar que España y que es necesario e imprescindible que se apueste por un modelo energético de energías renovables, más limpias y más seguras”.
El gobierno estatal respondió ante la pregunta planteada por el Grupo Confederal de Unidos Podemos que ante el nuevo Plan General de Residuos Radiactivos permitirá abrir un debate en la sociedad española sobre las instalaciones nucleares y radiactivas.
INFORME COMPLETO PRESENTADO
Introducción
Es
comúnmente aceptado que uno de los principales
problemas de la energía nuclear es la generación de residuos de
alta actividad, que
son peligrosos durante cientos de miles de años, para los que no
existe solución técnica totalmente
satisfactoria.
Sin embargo las centrales nucleares generan también una enorme
cantidad de residuos de
media, baja y muy baja actividad. Aunque este tipo de residuos no son
exclusivos de las nucleares, puesto que también se generan en
instalaciones médicas e industriales, el 95% en volumen de los
residuos de media, baja y muy baja actividad proceden de las
centrales nucleares. De hecho,
según los cálculos de ENRESA, se generará un volumen
equivalente a 250 piscinas olímpicas. Nadie sensato se opondría a
la generación de este tipo de residuos cuando producen un apreciado
bien social, como contribuir a la diagnosis de enfermedades mediante
radiografías o TACs, o la cura del cáncer mediante radioterapia.
Asimismo, todo el mundo aprecia la seguridad que las gammagrafías o
neutrografías otorgan en el uso de infraestructuras como puentes o
soldaduras de estructuras metálicas de edificios. Por lo tanto,
no debemos oponernos a la generación de residuos industriales
o médicos. Sin embargo,
no podemos decir lo mismo de los residuos producidos por las
centrales nucleares que son, como ya se ha dicho, la mayor
parte.
Los residuos de media, baja y muy baja actividad no son, desde luego,
ni tan tóxicos ni tan duraderos como los de alta. Sin embargo, no
puede decirse que sean
inocuos y por eso no pueden liberarse al medio ambiente. En España,
estos residuos se almacenan en el Almacén Temporal Centralizado de
El Cabril, en la Sierra de Hornachuelos, en la provincia de Córdoba.
En El Cabril sólo pueden depositarse residuos con una actividad
limitada (media actividad como máximo), con una vida media de hasta
30 años que hay que multiplicar por 10 para presumir que ya alcanzan
el valor del fondo natural y que no sean emisores de radiactividad
alfa. Sin embargo, como veremos, estas dos últimas exigencias no son
siempre respetadas por ENRESA, la empresa pública encargada de la
gestión de los residuos y del desmantelamiento de las instalaciones
nucleares.
El emplazamiento
El
Cabril nació con el pecado original de ser elegido
antidemocráticamente y mediante la política de hechos consumados.
En efecto, primero la antigua Junta de Energía Nuclear (hoy CIEMAT)
y luego ENRESA depositaban residuos médicos e industriales en la
Mina Beta de uranio abandonada de El Cabril. Los
primeros residuos nucleares se almacenan en 1961.
Son residuos nucleares los que provienen de la actividad de reactores
nucleares. En caso de El Cabril, los primeros residuos almacenados en
la mina Beta provenían de la experimentación del ejercito con el
reactor "Juán Vigón", regalo de los EEUU por el tratado
bilateral. Cuando esto se supo, las asociaciones ecologistas
realizaron una importante oposición contra este cementerio nuclear.
En particular, la asociación ecologista AEDENAT
emprendió una lucha legal que ganó en 2002. Anteriormente,
el 5 de
junio
de
1996,
AEDENAT
consiguió
la
sentencia
favorable
de
la
sala
novena de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, donde se recoge la obligación del desmantelamiento de El Cabril. El Ministerio de Industria y Energía recurrió la sentencia, pero AEDENAT consiguió la sentencia firme del Tribunal Supremo en contra de ENRESA en 2002, una sentencia que recogía que todo el depósito de residuos de media y baja procedentes de las nucleares era ilegal.
El
problema es que en
1992 se procede a una ampliación de El Cabril en superficie que
multiplicó su capacidad por 20. Y esta ampliación ya se realizó de
acuerdo a derecho,
aunque es
evidente que una
sentencia firme a tiempo habría dificultado la ampliación.
Esta forma de trabajar de ENRESA, eludiendo el debate público
democrático, genera muchos problemas y mucha desconfianza. Es
imprescindible un ejercicio de transparencia,
y más en este asunto que afecta a nuestro medio ambiente común y a
nuestra economía.
Por lo tanto, esta forma de elegir el emplazamiento de El Cabril, con
el único criterio de los hechos consumados, ha hecho que esta
decisión se tomara sin tener en cuenta los graves inconvenientes que
este emplazamiento tiene.
En
primer lugar, está situado en el sur de la península, alejado
de la mayor parte de instalaciones nucleares y radiactivas, lo que
obliga a incrementar las distancias de los transportes.
En la búsqueda de un emplazamiento para el ATC, por ejemplo, la
minimización de la distancia de los transportes era un criterio a
tener en cuenta.
En segundo lugar, El Cabril está en una zona de alto valor
natural, lo que debería haber sido suficiente para descartarlo
en una elección entre varios emplazamientos.
En tercer lugar, se encuentra en una zona de relativa alta
sismicidad. No es que puedan producirse terremotos inmanejables,
pero es cierto de nuevo que en una búsqueda nueva de emplazamientos,
sería deseable contar con la menor sismicidad
posible.
La seguridad
Si bien un escape tan grave como el escape de una central nuclear o
de un cementerio nuclear de alta radiactividad, no deben
menospreciarse los riesgos. En un escape de El Cabril la
contaminación sería local y somera, mucho más fácil de atajar que
en el caso de materiales de alta actividad. En primer lugar, el
hecho de que El Cabril esté alejado de las instalaciones nucleares,
aumenta la probabilidad de accidente de tráfico. Se han
registrado al menos dos accidentes de tráfico con vehículos que
transportaban residuos. En uno de ellos, ocurrido en 1989 con bultos
de Garoña, hubo que proceder a descontaminar el suelo.
La gestión de estos residuos también entraña riesgos. De hecho se
ha registrado un suceso en que los sistemas de protección contra
incendios se dispararon y estuvieron lanzando agua todo el fin de
semana en el edificio de
acondicionamiento de residuos, con el consiguiente riesgo de inundar
zonas radiactivas.
Además,
ENRESA ha detectado
recientemente un acceso de agua en la zona de pluviales,
donde se controla que las aguas procedentes de la lluvia no hayan
podido pasar a través de los residuos. La
detección de agua muestra que algún sello o aislamiento no ha
funcionado.
Según los informes del Consejo de Seguridad Nuclear
(CSN) entre 2013 y 2016 se han almacenado unos 600 kg de
uranio en forma de UO2 no recuperable con destino a Enresa. Justo en
el último informe del Consejo
de Seguridad Nuclear, después del revuelo de la denuncia que
hicimos, ya no dicen dióxido de uranio si
no residuos contaminados con
UO2.
Por otro lado, en el l Informe Semestral de 1990, CSN/IS/19/90,
cambia la definición de los residuos de media y baja actividad "los
bultos de residuos sólidos o solidificados no generadores de calor y
específicamente los siguientes". Es decir, suprimió de un
plumazo el requisito del periodo de tiempo que deben estar aislados
de la población y los ecosistemas sin modificar las características
de El Cabril, diseñado para soportar 300 años de aislamiento de la
basura radiactiva.
¿Qué hacer?
Si
el emplazamiento tiene problemas es necesario replantearse la
continuidad de esta instalación y su ampliación. El
Cabril está al 80% de su capacidad cuando sólo se han desmantelado
dos de las 10 centrales nucleares españolas.
Es evidente que ya no
puede servir para completar el desmantelamiento de la central de
Garoña (Burgos),
paralizada en julio de 2018. Tras comentar los problemas del
emplazamiento, no es buena idea aumentar su capacidad para
multiplicar el problema por 5. En estas condiciones no tiene ningún
sentido la ampliación de este cementerio nuclear. Por el contrario,
es necesario proceder al cierre escalonado de centrales nucleares
para mantener el problema en su mínima expresión, buscar otro
emplazamiento y evacuar los residuos para los que El Cabril no tiene
autorización.
Así
que lo sensato sería buscar un nuevo emplazamiento para los residuos
de media y baja radiactividad. Pero aquí aparece un problema similar
al de la gestión de los residuos de alta actividad. ¿Quién pone el
dedo en el mapa y decide cual es el emplazamiento apropiado? Aunque
la duración de estos residuos se limita a unos cientos de años y,
por tanto, no es comparable a los residuos de alta actividad, es
claro que una instalación de este estilo no es un acicate ni
económico ni medioambiental para la zona.
Una vez más, lo mejor sería establecer un calendario de cierre
de nucleares aceptable y, después de eso, se podría conseguir
un consenso social para encontrar un emplazamiento apropiado para
almacenar los residuos de media, baja y muy baja procedentes, sobre
todo, del desmantelamiento del parque nuclear español. Los criterios
para este sitio deberían ser la
reducción de transportes al máximo, el nulo valor natural de la
zona donde se instale y la estabilidad
sísmica.
El
pasado 14 de enero, el Gobierno de España ante la pregunta del Grupo
confederal de de Unidos Podemos, respondió que el proceso de
aprobación de un
nuevo Plan General de Residuos Radiactivos,
comprometido a presentar en el año 2019, permitirá
abrir un debate en la sociedad española acerca de esta u otras
instalaciones nucleares o radiactivas.
A su vez, esta petición pretende que se abra un debate sobre la
política energética española y europea que gire en torno hacia un
proceso de cambio y apuesta por las energías, renovables, limpias y
seguras.
Por ello, a su vez solicitamos que se produzca una visita in situ al
Almacén Temporal Centralizado de El Cabril por parte de una
delegación de eurodiputados, así como de miembros de la Comisión
europea, para analizar y conocer de primera mano la actual situación
que preocupa a la ciudadanía afectada por esta instalación.
Comentarios
INSTALACIÓN NUCLEAR DEL
CABRIL (HORNACHUELOS-CÓRDOBA-ESPAÑA)
ASOCIACIÓN ECOLOGISTA DE HORNACHUELOS “HORNASOL”
1) NO HAY PUBLICADA NINGUNA
ACTA DE INSPECCIÓN DEL
CSN (CONSEJO DE SEGURIDAD NUCLEAR) DESDE EL DÍA 18 DE JULIO DE 2018, PRESUMIBLEMENTE PARA QUITAR CAUSAS DE INCUMPLIMIENTOS DE LA LEGISLACIÓN EUROPEA.
2) SEGÚN EL ACTA ÚLTIMA PUBLICADA AL DÍA DE HOY
ES DECIR, LA DE REFERENCIA:
CSN/AIN/CABRIL/18/215, EN LA MISMA SE SEÑALA LA PERMISIVIDAD DE ENTRADA DE U-235 MENOR O IGUAL AL 5% Y MÁXIMO DE 85 GRAMOS POR BULTO POR LO QUE SEGÚN LA SOCIEDAD NUCLEAR ESPAÑOLA (SNE):
La mayoría de los reactores necesitan una concentración de U235 superior a la que existe en su estado natural, por eso es necesario someterlo a un enriquecimiento hasta alcanzar concentraciones de U235 del orden del 4% al 5% de manera que permita generar la energía térmica necesaria y convertirla en electricidad.
POR LO TANTO ESTÁN PERMITIENDO EL ALMACENAMIENTO DE RESIDUOS DE ALTA ACTIVIDAD Y LARGA VIDA A FECHA DE HOY(?)
3) EN LA PROPUESTA DE CSN/PDT/CABRIL/1705/72 SOBRE REVISION PERIODICA DE SEGURIDAD DEL PERIODO 2002-2011 SE HACE REFERENCIA A LO
SIGUIENTE EN SUS CONCLUSIONES:
PUNTO 2: “instrumentar una celda de la plataforma sur con objeto de realizar un seguimiento exhaustivo de los mecanismos de aparición de agua”
PUNTO 4, textual: “debido a la consideración por parte de la evaluación de que el fenómeno descrito por Enresa, como justificación de la aparición de agua en las celdas de almacenamiento de El Cabril, presenta incertidumbres, se requiere a Enresa, presentar una propuesta de proyecto…
……con objeto de verificar la eficacia de ésta en la desaparición o disminución de agua en las celdas.
PUNTO 5: incluir en la revisión del Estudio de Seguridad:
La actualización de la información de parámetros sísmicos e hidrogeológicos
Las modificaciones de diseño realizadas en la construcción de los sistemas de drenaje de celdas de la Plataforma Norte, Sur (incluido el sistema de drenaje profundo)….Todos ellos se consideran sistemas de seguridad a largo plazo.
4) LAS INFILTRACIONES DE AGUA Y FILTRACIONES YA FUERON OBJETO DE DENUNCIAS Y RECLAMACIONES ADMINISTRATIVAS HACIA EL GOBIERNO DE ESPAÑA, CSN Y ENRESA POR PARTE DE ESTA ASOCIACIÓN HORNASOL EN
LA FECHA DEL 11 DE JULIO DEL 2008, ACTA 1085 DEL CSN DEL 24-7-2008 Y EN ESCRITO DE ENTRADA DEL CSN NÚMERO 12549 DE 11-JULIO-2011, EN DONDE SE EXPONÍAN VARIADAS CUESTIONES DE LA SEGURIDAD DEL CABRIL, CON RESPUESTA DEL CSN DE 1-8-2011,
DONDE SE ADMITE LA INCINERACIÓN DE RESIDUOS, QUE EXISTEN FILTRACIONES QUE SIGUEN INVESTIGANDO: ¿Y LAS AGUAS SUBTERRÁNEAS? Y QUE LAS RESIDUALES LAS VIERTEN A LA CUENCA DEL GUADALQUIVIR, PRINCIPAL RÍO ANDALUZ, A TRAVÉS DEL RÍO BEMBÉZAR PROTEGIDO, COMO RESERVA DE LA BIOSFERA POR LA UNESCO Y QUE RIEGA LA MAYOR PARTE DE LA VEGA DEL
GUADALQUIVIR.
5) LA DISMINUCIÓN DE LA POBLACIÓN DE HORNACHUELOS, MUNICIPIO DONDE SE UBICA EL CABRIL HA PASADO DE 5439 (1990) A 4541 (2019), ES DECIR CASI 900 HABITANTES MENOS, UN 18%, DESDE QUE EL GOBIERNO AUTORIZA SU COSNTRUCCIÓN.
6) LA NECESIDAD DE LA EXISTENCIA DE UN PLAN DE EMERGENCIA EXTERIOR,
UN ESTUDIO EPIDEMIOLÓGICO DEL SERVICIO ANDALUZ DE SALUD (SAS) Y UNA FECHA DE CIERRE DE LA INSTALACIÓN NUCLEAR DEL CABRIL SON CUESTIONES VITALES PARA NUESTRO MUNICIPIO DE HORNACHUELOS.